El estudio sectorial ha sido realizado, a partir de las estadísticas oficiales sobre el sector ofrecidas por el Instituto Nacional de Estadística, por el Dr. Óscar Gutiérrez Aragón, Director del Departamento de Empresa de la Escola Universitària Mediterrani de Barcelona (Universitat de Girona) y autor de numerosos artículos académicos del ámbito económico-empresarial.
Delia Saleno, presidenta de CEVE, ha señalado que, “como única organización representativa del sector económico veterinario actuamos de forma responsable encargando a una entidad externa de reconocido prestigio la elaboración de estos estudios económicos, que seguirán publicándose en el futuro, con el fin de obtener un conocimiento preciso y real de la situación del sector y así poder tomar decisiones estratégicas encaminadas a corregir las deficiencias detectadas”.
En este sentido, ha recordado que “CEVE siempre se ha mostrado como una organización comprometida y proactiva. Así se entiende que haya sido esta organización patronal la que haya convocado a las organizaciones sindicales para la negociación de un convenio colectivo en el sector, siendo conscientes de la importancia de la normalización de la relación laboral para la creación de empleo de mejor calidad”. Además, apunta que “en la negociación se están teniendo muy en cuenta, precisamente, los datos de estos estudios económicos con el fin de corregir los problemas estructurales de baja productividad y reducida remuneración que lastran su actividad económica”.
Finalmente, Delia Saleno, ha expresado su deseo de que “en breve plazo se pueda formar un gobierno que finalmente haga efectivo el compromiso adquirido sobre el retorno al tipo reducido del IVA de los servicios veterinarios, así como para llevar a la práctica la total integración de la actividad veterinaria dentro de la estructura sanitaria nacional, en consonancia con la realidad social y científica que, de acuerdo con el concepto “One Health” demanda la actualización organizativa de este sector”.
Según se desprende del contenido del informe, la promulgación del Real Decreto-Ley 20/2012, que hizo pasar al tipo impositivo general de IVA la prestación de servicios veterinarios a animales de compañía en España, provocando un incremento impositivo de 13 puntos porcentuales (del 8% al 21%), al producirse en un escenario de profunda crisis económica, además de generar múltiples problemas de índole sanitaria, causó un notable deterioro en un gran número de indicadores económicos, financieros y laborales del sector veterinario. A partir del ejercicio económico correspondiente al año 2015, coincidiendo con la mejora de las cifras macroeconómicas en España, el sector experimenta una progresiva recuperación en un gran número de sus indicadores económicos y financieros, acreditando una evidente mejora económica en la actualidad.
Sin embargo, existe una serie de indicadores relacionados con la calidad del empleo y a la productividad por empleado, que, a pesar de la mejoría económica, se han visto seriamente dañados. La evolución de los indicadores estudiados confirma que, en este sector, caracterizado por una progresiva feminización (fenómeno de indudable trascendencia y con evidentes consecuencias positivas) y debido a las circunstancias descritas en el informe, un gran número de profesionales veterinarios (tanto mujeres como hombres y, sobre todo, los más jóvenes) están padeciendo una seria situación de precariedad laboral.
En concreto, entre los indicadores referentes a la calidad del empleo que se han visto seriamente dañados a lo largo del periodo analizado se encuentran los siguientes: