Institucional
FECOVET: El papel crucial del veterinario en "Una Salud"
La Federación de Colegios y Consejos Veterinarios de la República Argentina destaca la importancia que tiene la profesión veterinaria en la detección y control de enfermedades zoonóticas y en la implementación de políticas de control bajo el enfoque de "Una Salud".
La Federación de Colegios y Consejos Veterinarios de la República Argentina (FECOVET), que agrupa más de 15 mil veterinarios de todo el país, a través de sus respectivos Colegios y Consejos Profesionales, ha publicado recientemente en su página web un artículo titulado: El papel crucial del veterinario en el control de zoonosis y su contribución al enfoque "Una Salud". El artículo dice:
Las zoonosis, enfermedades que pueden transmitirse entre animales y seres humanos, son una preocupación constante para la salud pública global. En este escenario, nosotros, los veterinarios, jugamos un rol importante no solo en la identificación y control de estas enfermedades, sino también en la educación y prevención en la comunidad. Como destaca Natalia Elstner, presidenta de la Federación de Colegios y Consejos de Veterinarios de la República Argentina (FECOVET), somos actores esenciales en la detección temprana de enfermedades zoonóticas y en la implementación de políticas de control que protejan tanto a los animales como a las personas.
Dentro de las principales zoonosis a vigilar, identificamos enfermedades como la rabia, la leishmaniasis y la leptospirosis. Estas son de particular preocupación debido a su capacidad de propagación y el grave riesgo que representan para la salud humana. Aunque existen muchas enfermedades zoonóticas, estas siguen siendo de gran relevancia, especialmente en determinadas regiones donde se presentan más casos. La rabia, por ejemplo, sigue siendo una amenaza significativa debido a su alta mortalidad en humanos, mientras que la leishmaniasis ha mostrado un aumento en diversas áreas del país. Por su parte, la leptospirosis, aunque más comúnmente asociada a animales de granja, también puede infectar a los humanos y causar enfermedades graves, especialmente en zonas rurales o afectadas por inundaciones.
Como responsables de la salud animal, contamos con el conocimiento y la experiencia necesarios para identificar estas enfermedades en los animales de forma temprana, lo que es crucial para prevenir la transmisión a los seres humanos. «Somos los que más sabemos de enfermedades zoonóticas», afirma Elstner, destacando que muchas veces somos el primer punto de contacto en la detección de estas enfermedades. Además de nuestra capacidad diagnóstica, tenemos la responsabilidad de seguir protocolos establecidos para notificar las enfermedades zoonóticas a las autoridades sanitarias. Esto es esencial para garantizar una rápida respuesta ante posibles brotes y evitar que se diseminen.
FECOVET actúa como un puente entre quienes ejercemos la profesión diariamente y las políticas públicas, al identificar problemáticas y proponer soluciones basadas en nuestra experiencia. «Debemos incluirnos en las organizaciones de segundo grado para poder coordinar políticas en pos de la salud humana, animal y ambiental». Esta colaboración interinstitucional es crucial, ya que permite coordinar esfuerzos y garantizar que las políticas de control sean efectivas y adaptadas a las necesidades locales.
En cuanto a la prevención, uno de los aspectos más importantes es la implementación de estrategias de bioseguridad tanto en clínicas veterinarias como en establecimientos pecuarios. Las zoonosis pueden propagarse rápidamente si no tomamos medidas adecuadas de control, por lo que debemos ser rigurosos en la adopción de prácticas de bioseguridad. Esto incluye el uso de equipos de protección personal, la correcta desinfección de espacios e instrumentos, el aislamiento de animales enfermos y una adecuada gestión de los residuos biológicos. Estas medidas son esenciales para reducir el riesgo de transmisión de enfermedades, especialmente en lugares con alta concentración de animales y donde los seres humanos tienen un contacto constante con ellos.
Más allá de nuestro trabajo en el ámbito clínico y de control, también desempeñamos un papel educativo crucial. La prevención de zoonosis depende en gran medida de la concientización de la comunidad sobre los riesgos y las prácticas adecuadas para evitar la propagación de enfermedades. Con nuestro conocimiento experto sobre salud animal, somos los profesionales más capacitados para informar a la población sobre medidas preventivas como la vacunación, el control de vectores y la higiene adecuada. La educación comunitaria es un componente esencial para reducir la incidencia de enfermedades zoonóticas y mejorar la salud pública en general.
Por otro lado, el concepto de «Una Salud», que promueve la integración de los esfuerzos en salud humana, animal y ambiental, es fundamental en el abordaje de las zoonosis. Como señala Elstner, es necesario fortalecer el trabajo en red entre veterinarios y profesionales de otras disciplinas, como médicos, biólogos y ambientalistas. Este enfoque colaborativo permite abordar los problemas de salud de manera más integral y efectiva, dado que las zoonosis afectan a múltiples áreas y requieren un abordaje conjunto para su control y prevención.
Como expertos en salud animal, no solo tenemos el deber de controlar las enfermedades en los animales, sino también de colaborar con otros sectores de la salud pública para garantizar una respuesta más efectiva frente a los riesgos zoonóticos. «Debemos estar en contacto con otros sectores de la salud pública para poder abordar los problemas de manera integral», afirma Elstner, resaltando la importancia de un enfoque interdisciplinario para enfrentar las zoonosis de manera más eficaz.
Desempeñamos un papel vital en la lucha contra las zoonosis, no solo como detectores de enfermedades, sino también como promotores de la prevención, la bioseguridad y la educación en la comunidad.
La colaboración interdisciplinaria y el enfoque «Una Salud» son esenciales para abordar los desafíos que presentan las zoonosis y garantizar una respuesta más efectiva ante estos riesgos para la salud pública.