Acuicultura
Especialistas del INTA destacan el potencial del cultivo de peces, mariscos y algas
Argentina podría capitalizar un escenario mundial de fuerte crecimiento en la demanda de productos de origen acuático, consideran los especialistas del INTA y destacan el potencial de la producción nacional de trucha Arco Iris y pacú, así como mejillón, surubí, dorado, boga, pejerrey, erizos, algas y centollas.
Frente al fuerte crecimiento a nivel mundial en la demanda de productos de origen acuático, especialistas del INTA consideran que Argentina podría capitalizar ese escenario.
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (ONUAA, o más conocida como FAO), la acuicultura proporciona el 57 % del alimento para consumo humano en el mundo y representan el 15 % de las proteínas de origen animal consumidas a nivel mundial, aportando también nutrientes esenciales como ácidos grasos omega 3, minerales y vitaminas.
Ariel Belavi -referente nacional de acuicultura del INTA-, considera “el contexto mundial es muy beneficioso para la Argentina y abre una oportunidad”. En este sentido, explica que “nuestro país tiene mucho potencial por su amplia variedad de condiciones naturales y la capacidad técnica para dar respuesta a estas demandas”.
Para el investigador, existe una tendencia de consumo impulsada por la búsqueda de alimentos nutritivos y de calidad, por lo que los productos acuícolas cobran mayor protagonismo.
En esta línea, Belavi considera que “el potencial cultivo de los próximos años mostrará un crecimiento exponencial en sus valores y volúmenes”. Y agrega que “la acuicultura se presenta como una actividad promisoria que permitiría un aumento de la producción de productos de origen acuático”.
Para el especialista del INTA, la acuicultura en Argentina se basa principalmente en dos especies: el pacú en el NEA y la trucha Arco Iris en la Patagonia. Esta última representa los mayores volúmenes de producción y tiene una proyección de 6500 toneladas para 2024 y 10 mil toneladas para 2025 dada la cantidad de ejemplares ya sembrados.
Por su parte, la producción de mejillón tiene una proyección de producción para 2025 de 5 mil toneladas, de acuerdo con las semillas sembradas y a los proyectos de inversión. A estas tres, le siguen el surubí, dorado, boga, pejerrey, erizos, algas y centollas.
“Dentro de los numerosos desafíos que enfrenta la construcción de la cadena acuícola a escala nacional hay dos más importantes vinculados con el aumento de la producción de exportación y posicionamiento del pacú como una carne de pescado portable, por otro lado, la selección y adaptación de una especie para cultivo consumo y exportación para el país. En este sentido, la boga se presenta con una especie apta para consumo de exportación que está haciendo evaluada con muy buenas expectativas”, especifica Ariel Belavi.
(Con información del INTA)