Estudio
Identifican 30 géneros bacterianos básicos del microbioma de gatos sanos
Los investigadores buscan mejorar la detección y tratamiento de algunas enfermedades de los gatos domésticos. También determinar las diferencias en las comunidades microbianas fecales asociadas con la edad, la dieta y el entorno de vida de los gatos.
A pesar de las complejidades inherentes del microbioma intestinal y sus interacciones con los sistemas del huésped, los datos del microbioma están mejorando la comprensión colectiva de la salud y la enfermedad. Por ejemplo, varias enfermedades crónicas que afectan a las poblaciones humanas han alterado significativamente la composición del microbioma intestinal en comparación con los microbiomas de cohortes sanas. Asimismo, los gatos domésticos tienen problemas de salud que también están asociados con desequilibrios (disbiosis) en la composición de las bacterias intestinales, como la enfermedad inflamatoria intestinal (EII), linfoma, diabetes, enfermedad periodontal y dermatitis atópica.
Con el objetivo de mejorar la detección y tratamiento de algunas enfermedades de los gatos domésticos, investigadores de la Universidad de California Davis han llevado a cabo un estudio en el que presentan un conjunto de datos de microbioma fecal definido taxonómicamente para gatos domésticos sanos alimentados con una variedad de dietas comerciales.
Los investigadores utilizaron ese conjunto de datos de referencia saludable para explorar cómo la edad, la dieta y el entorno de vida se correlacionan con la composición del microbioma fecal.
Identificaron 30 géneros bacterianos básicos: Prevotella, Bacteroides, Collinsella, Blautia y Megasphaera fueron las más abundantes, y Bacteroides, Blautia, Lachnoclostridium, Sutterella y Ruminococcus gnavus, fueron los más prevalentes.
Si bien la composición de la comunidad se mantuvo relativamente estable en diferentes clases de edad, la cantidad de taxones centrales presentes disminuyó significativamente con la edad.
La composición del microbioma fecal varió con el tipo de dieta del huésped. Los gatos alimentados con croquetas tenían un número leve, pero significativamente mayor, de taxones centrales en comparación con los gatos que no se alimentaban con croquetas.
Los microbiomas centrales de los gatos alimentados con algunos alimentos crudos contenían taxones no tan prevalentes o abundantes como los gatos alimentados con dietas que incluían croquetas.
El entorno de vida también tuvo un gran efecto en la composición del microbioma fecal. Los gatos que vivían en hogares diferían significativamente de los que vivían en refugios y tenían una mayor parte de sus microbiomas representados por taxones principales.
Los autores del estudio señalan que el trabajo refuerza los hallazgos de que "la edad, la dieta y el entorno vital son factores importantes a tener en cuenta a la hora de definir el microbioma básico de una población".