El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) informó que "se detectó en sus controles habituales en el aeropuerto internacional de Ezeiza, una mascota proveniente de Europa, que en su tránsito hizo escala en Colombia. Llegó al país sin su certificación sanitaria y sin la protección antirrábica correspondiente. El animal en cuestión es un perro de un año y medio, llamado Coco que tiene vencida la vacunación correspondiente y que por eso no puede ingresar a la Argentina".

La información agrega que "frente a este incumplimiento se informó al pasajero que viajaba con el animal, del procedimiento y la necesidad de que vuelva al país de origen para completar la documentación faltante. Asimismo, mientras se trabajó en la tramitación de su retorno con la línea aérea, -que se realizaría en el día de hoy-, desde el Senasa se avanzó en poner al perro en custodia dentro del aeropuerto, hasta que se resuelva su regreso a origen, salvaguardando su bienestar, brindándole los cuidados y el alimento necesario".

Franco Gavidia, propietario del perro mestizo de un año y medio llamado "Coco", es argentino y vive en Hungría. Viajó a Buenos Aires con la mascota para visitar a su hija. Reconoce que por tener que viajar de urgencia descuido la documentación de su mascota.

Molesto porque se le prohibió el ingreso al país al animal lo hizo público en las redes sociales y fue entrevistado en varios medios de prensa.

"Estoy en mi país de origen, no entiendo cómo no me pueden dar una mano con esto", expresó Franco Gavidia.

"Lo que estoy pidiendo es que lo pongan en cuarentena aquí, yo me encargo de todos los gastos", agregó Gavidia. Señaló también que la responsable del Senasa en Ezeiza se negó en todo momento a su petición y que le dijo que deportarían al animal.

"No me puedo ir, tengo acá una hija de 5 años. Yo no me puedo ir de vuelta, sólo pido que haga una cuarentena, estoy durmiendo en el suelo del aeropuerto. Yo de acá no me voy hasta que no me garanticen que el perro va a estar seguro", indicó Gavidia.

Información oficial señala que "es deber y responsabilidad del organismo, por Ley 27.233, bregar por el estatus sanitario del país, así como la prevención, el control y la erradicación de las enfermedades que afecten tanto a la sanidad de los animales y los vegetales, la producción agropecuaria, y a la salud pública en general". Agrega que "la responsabilidad primaria en este caso compete a su dueño y a la compañía aérea, que lo trajo desde España a la Argentina, con escala en Colombia. Vale aclarar que el microchip (identificación individual de la mascota) de este animal donde se encuentran cargados todos sus datos sanitarios, corresponde a Hungría".

Finalmente se informó oficialmente que el animal no será deportado y deberá cumplir 10 días de cuarentena en instalaciones aduaneras del aeropuerto de Ezeiza y será vacunado contra la rabia.

Sobre el Certificado Veterinario Internacional
El Senasa, aprovechando este acontecimiento, recuerda que todos los caninos y felinos domésticos que ingresen a la República Argentina desde cualquier país del mundo deben presentar su Certificado Veterinario Internacional (CVI) emitido por la Autoridad Veterinaria del país de origen que contenga los requisitos sanitarios de Argentina.

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