En el mes de marzo pasado una la proteccionista de animales tucumana, Karina Garbero, recibió un video en el que se veía a un joven abusar sexualmente de una perra, tras lo cual realizó la denuncia en la comisaria de Los Pocitos, en el sur del departamento Tafí Viejo, provincia de Tucumán.

Se constató que el joven solía realizar los abusos a su perra, que el mismo filmaba esos abusos y los subía a la aplicación Telegram.

La causa se judicializó y en las últimas horas se conoció el fallo de la jueza Carolina Ballesteros, quien le impuso al acusado, un joven de 22 años, una restricción perimetral por la cual no puede acercarse a menos de 300 metros de los que eran perros. Además le quito la tenencia de los animales y le prohibió por el término de seis meses volver a tener animales de compañía.

En el texto del fallo, que no tiene precedentes en esa provincia, la jueza expresó “El animal no es un objeto”, y que “Ninguna sociedad puede considerarse civilizada si legitima el trato cruel y denigrante hacia los animales”.

Si bien la medida se tomó por el maltrato contra la perra en cuestión, también incluyó a los otros dos animales que tenía el joven en su casa.

Los dos perros ya fueron adoptados por nuevas familias y la perra abusada aún está a la espera de un nuevo hogar.

Resta esperar que una junta médica determine el estado de salud mental del joven y se exprese al respecto para luego determinar los pasos judiciales a seguir. Mientras tanto, el joven deberá realizar un tratamiento de desintoxicación a las drogas, cumplir con determinadas normas de conducta y no realizar medidas que entorpezcan la investigación.