OMS
Exhortan a producir dexametasona para el tratamiento del COVID-19
La Organización Mundial de la Salud exhortó este lunes a aumentar la producción y distribución de la dexametasona, como droga eficaz para el tratamiento de pacientes graves con coronavirus. “Afortunadamente, es una medicina barata y de la que hay fabricantes en todo el mundo, así que estamos confiados en que éstos aceleren su producción”, señaló el director de organismo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) destacó este lunes que, una vez determinado el potencial de la dexametasona para salvar las vidas de los pacientes graves de COVID-19, es necesario aumentar la rápida producción de este fármaco y asegurar su pronta distribución en todo el mundo.
“El desafío ahora es incrementar la producción y distribuir de forma rápida y equitativa la dexametasona, especialmente donde sea más necesaria”, subrayó en la conferencia de prensa de hoy el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Días atrás, la Universidad de Oxford en el Reino Unido había asegurado mediante una nota de prensa que la dexametasona reduce el riesgo de muerte en pacientes de COVID-19 con complicaciones respiratorias.
La dexametasona es un esteroide que se utiliza desde la década de 1960 en otras dolencias y que es muy económico, pues no es necesaria licencia para su producción. Pertenece a la familia de los corticoides (o corticosteroides), que tienen propiedades antiinflamatorias, inmunosupresoras y antialérgicas.
Estos fármacos son esenciales en el manejo de patologías como el asma, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), el distrés respiratorio agudo, las alergias broncopulmonares, nasales, cutáneas y oculares. También se usan para los choques anafilácticos, la artritis reumatoide, la esclerosis múltiple, el edema cerebral e incluso reducir los efectos secundarios de la quimioterapia, entre otros trastornos.
“Afortunadamente, es una medicina barata y de la que hay fabricantes en todo el mundo, así que estamos confiados en que éstos aceleren su producción”, subrayó Tedros y añadió que “debe darse prioridad a los países que más casos tienen en la actualidad, y la producción y distribución debe llevarse a cabo con transparencia y constante supervisión” para evitar productos falsificados o por debajo de los estándares de calidad”.
Estas novedades se producen en un momento en el que se produjo este domingo un nuevo récord de casos diarios (más de 183.000 en el mundo) debido a que muchos países siguen en el momento álgido de la pandemia.
En relación a esto Tedros advirtió que “algunos países que han suprimido con éxito la transmisión están experimentando una reincidencia de casos a medida que reabren sus sociedades y economías”.
"Todos los países enfrentan un difícil equilibrio entre proteger a su población y minimizar el daño socioeconómico", admitió Tedros, quien, sin embargo, subrayó que "no se trata de elegir entre vida o trabajo, sino en preservar ambas cosas".