Por definición, la Inteligencia Artificial (IA) es la combinación de algoritmos planteados con el propósito de crear máquinas que presenten las mismas capacidades que el ser humano. 

Herramientas como la ya famosa ChatGPT (creada por OpenAI y lanzada el 30 de noviembre de 2022), han sido creadas para responder preguntas sobre casi cualquier tema.

Desde su lanzamiento, millones de personas en todo el mundo lo utilizan y se sorprenden por sus resultados. Sin embargo, más sorprendente aún es ChatGPT-4 (última y más potente versión lanzada el 14 de marzo de 2023 por OpenAI).

Sobre este nuevo sistema, OpenAI afirma que es mucho más creativo y colaborativo que sus predecesores, y que puede resolver con una mayor precisión problemas difíciles, ya que han seguido entrenándolo para que tenga un conocimiento general más amplio que su predecesor.

Al igual que sucede con buscadores como Google, las personas también buscan en las herramientas de IA respuestas a temas de salud.

GPT-4 y medicina veterinaria

Recientemente, el propietario de un perro hizo pública una experiencia en la que relacionó a ChatGPT-4 con la medicina veterinaria.

El usuario @peakcooper relató su historia en Twitter, explicando cómo esta herramientaa de IA actuó para, en cierto modo, "salvar la vida de su perro".

Según el tuitero, su perro supuestamente tenía una enfermedad transmitida por garrapatas y un cuadro grave de anemia, por lo que le habían realizado un análisis de sangre, pero el tratamiento no se traducía en resultados efectivos. No conforme con la atención del profesional decidió acudir a la tecnología. Según describió utilizó ChatGPT-4 para encontrar más respuestas y posibles tratamientos. Le contó al chatbot la situación y agregó los resultados de los análisis de sangre.

La herramienta de IA arrojó diferentes diagnósticos, entre ellos una enfermedad autoinmune. Con esa información acudió a otra clínica veterinaria y de esa forma se inició un nuevo tratamiento con evidentes mejorías en la salud del perro.

Lo sucedido lleva a preguntarse: ¿Son las herramientas de IA como GPT-4 una amenaza para los médicos veterinarios o son un recurso que los profesionales pueden utilizar para mejorar un diagnóstico?

Como muchos otros desarrollos tecnológicos, las herramientas de IA son disruptivas y pueden generar polémica.

Recientemente, un grupo de expertos en tecnologías pidieron una pausa de seis meses en el entrenamiento de los poderosos sistemas de inteligencia artificial, argumentando que se trata de una potencial amenaza para la humanidad.

En una carta abierta, que tiene más de 1.700 firmas, aseguraron que las empresas que trabajan con esta tecnología están en "una carrera fuera de control para desarrollar e implementar mentes digitales cada vez más poderosas que nadie, ni siquiera sus creadores, pueden comprender, predecir o controlar de forma fiable".

En la carta, piden que las empresas que desarrollan este tipo de programas "pausen de inmediato, durante al menos 6 meses, el entrenamiento de los sistemas de inteligencia artificial más potentes que GPT-4".

"Esta pausa debe ser pública y verificable, e incluir a todos los actores clave. Si tal pausa no se puede implementar rápidamente, los gobiernos deberían intervenir e instituir una suspensión", agrega el comunicado.

Emitida por la organización sin fines de lucro Future of Life Institute, que tiene entre sus asesores externos a Elon Musk, la declaración advierte que estos sistemas pueden plantear "profundos riesgos para la sociedad y la humanidad".

El grupo de expertos argumenta que los poderosos sistemas de inteligencia artificial pueden generar información errónea y reemplazar los trabajos con automatización.

Martha Gabriel, autora del libro "Inteligencia Artificial: del cero al metaverso", afirma que será necesario adaptarse a los nuevos tiempos. "Lo que marca la diferencia en este contexto ya no son las respuestas, sino las preguntas. Hay que saber preguntar. Para saber preguntar hay que saber pensar críticamente", dice.

La IA ha perseguido a la humanidad desde mediados del siglo XX, pero hasta hace poco seguía siendo una perspectiva lejana, algo que pertenecía a la ciencia ficción. Sin embargo, ya está entre nosotros y hay que adaptarse lo más rápido posible a convivir con ella. 

Es indudable que GPT-4 tiene la capacidad de ser una herramienta, que bien utilizada por un profesional, puede contibuir y mucho a conclusiones importantes que contribuyan a diagnósticos más precisos en materia de salud. El desafío ya está en marcha.

Opinión del Dr. Javier Paoloni

Dr. Javier Paoloni. Médico Veterinario, Río Cuarto, Córdoba, Argentina

"Sin duda, estos avances provocan disrupción por donde se lo mire. Pero el pensamiento científico, crítico, flexible, la empatía, el planificar un camino hacia el diagnóstico ajustado a cada paciente y propietario en particular, el determinar un tratamiento para ese paciente y ese propietario único... y brindar atención compasiva (la más alta que puede brindar un equipo veterinario) no podrá hacerlo ninguna inteligencia artificial. En esa calidad de atención debemos enfocarnos los Médicos Veterinarios. Lo digo con humildad, serenidad y firmeza: podemos brindar un servicio inigualable".