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sábado 03 de mayo de 2025 - Edición Nº2256
Vet Market » Divulgación » 21 oct 2022

Investigación

Confirman la causa de la muerte de las 30 ballenas en Península Valdés

El Instituto de Conservación de Ballenas dio a conocer las conclusiones acerca de la causa de la muerte de los cetáceos, hallados entre fines de septiembre y principios de octubre, en Península Valdés, en la provincia de Chubut. También describe los factores que sostienen la conclusión.


El Instituto de Conservación de Ballenas (ICB) elaboró un pormenorizado informe donde detalle el trabajo de investigación realizado a raíz de las 30 ballenas halladas muertas recientemente en la Península Valdés, provincia de Chubut.

En dicho informe el ICB señala "El Programa de Monitoreo Sanitario Ballena Franca Austral (PMSBFA), el Instituto de Conservación de Ballenas (ICB), el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), el Instituto de Investigación de Hidrobiología de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco y la Dirección de Fauna y Flora Silvestres de Chubut concluyen que la investigación realizada hasta la fecha sostiene la hipótesis según la cual la mortandad de ballenas se debió a una floración algal nociva en el Golfo Nuevo, ocurrida entre fines de septiembre y principios de octubre".

 

Factores detallados por el ICB que sostienen esta conclusión:

- Las primeras 6 ballenas murieron próximas entre sí y en el transcurso de tan sólo 4 días. 

- Las muertes ocurrieron de forma aguda y todas las ballenas examinadas presentaron evidencias de ingesta reciente de alimento. 

- Las ballenas muertas estaban en buena condición corporal, con una gruesa capa de grasa aislante y abundante grasa abdominal, y sin evidencias de lesiones traumáticas externas o internas.

- Las ballenas examinadas habían ingerido diatomeas Pseudo-nitzschia spp. y/o dinoflagelados del género Alexandrium complejo catenella/tamarense, productores de biotoxinas capaces de causar la muerte de aves y mamíferos marinos, incluyendo grandes ballenas.

- Se encontraron biotoxinas del grupo Paralizante de Moluscos tanto en el contenido gastrointestinal como en diversos tejidos y fluidos de las ballenas muertas examinadas.

- Las muertes afectaron principalmente a hembras adultas, la clase de edad con la mayor demanda energética por estar amamantando a sus crías en los golfos de Península Valdés, y que suele alimentarse de plancton en primavera. 

- La muerte de las ballenas se solapó en tiempo y espacio con una floración algal nociva y valores muy elevados de biotoxinas del tipo paralizante en moluscos bivalvos y plancton en el Golfo Nuevo. 

- En simultáneo con la mortalidad de ballenas se registraron muertes en aves marinas y lobos marinos, en los que también se comprobó presencia de Toxina Paralizante de Moluscos en cantidades significativas. 

- Desde el 10 de octubre no se han registrado nuevas muertes de ballenas, lo que coincide con un marcado descenso en la abundancia de la especie productora de toxinas paralizantes en el plancton y en los niveles de biotoxinas en moluscos del Golfo Nuevo.

 

 

En el informe, el ICB detalla un aspecto poco conocido sobre los hechos sucedidos en Península Valdés "Durante el evento también se documentó la muerte de varios pingüinos de Magallanes y otras aves marinas y de un lobo marino de un pelo con sintomatología compatible con biotoxinas en el Golfo Nuevo. Como parte de la investigación y ante la sospecha de intoxicación por toxinas producidas por un evento de floración algal nociva, que se caracteriza por afectar a múltiples especies en un mismo tiempo y espacio, se colectaron muestras de varios individuos. Los análisis realizados hasta la fecha corroboran los hallazgos en las ballenas, con todos los animales negativos a toxina amnésica, pero positivos a toxinas paralizantes de moluscos en cantidades variables. Esto se explica porque las ballenas francas se alimentan de copépodos que actúan como vectores en la transferencia de toxinas desde la base de la cadena trófica, e ingieren las toxinas de manera directa al filtrar las microalgas que se encuentran en el agua. En cambio, las aves como los pingüinos y otros mamíferos marinos como los lobos, son predadores y consumen presas capaces de bioacumular toxinas, por lo que en general se exponen a dosis mayores". 

 

 

“Las ballenas y otras especies se han convertido en centinelas de la salud del mar, ya que pueden dar señales de alerta temprana de cambios en el ecosistema oceánico. La magnitud de la mortandad de ballenas adultas y juveniles de este año no se había registrado antes en la población de Península Valdés, y fue un evento preocupante para toda la comunidad. Resaltamos la labor de muchas personas, instituciones y organismos que permitió evaluar lo sucedido rápidamente y con gran solidez técnica. Es necesario seguir trabajando de manera colaborativa e integrada, para comprender mejor estos cambios ambientales en el escenario actual, y tomar las medidas que sean necesarias para mitigarlos y prevenirlos en el futuro.”

Dres. Marcela Uhart y Mariano Sironi, Co-directores del PMSBFA

 

Quienes deseen acceder al informe completo del ICB pueden hacer clic aquí.

 


 

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