El ave esfenisciforme, cuyo nombre es Lucas, forma parte de la colonia de pingüinos africanos que habitan en el Zoológico de San Diego, en los Estados Unidos.

El historial médico del pingüino, de 4 años de edad, comenzó hace más de 3 años, cuando desarrolló una infección en la columna que lo dejó con músculos débiles en las patas y la incapacidad de pararse correctamente sobre sus dedos.

La afección que padece es conocida como pododermatitis. Debido a esto, Lucas se vio obligado a descansar en áreas de sus tobillos que normalmente no tocarían el suelo.

A pesar de que le proporcionaron medicamentos para el dolor, fisioterapia y tratamientos de acupuntura para tratar de mejorar su columna no pudieron mejorar su condición. 

Los especialistas recurrieron entonces a una organización de nombre Thera-Paw, la cual fabrica productos de rehabilitación y asistencia para animales con necesidades especiales.

Para la confección del calzado, el personal del Zoológico de San Diego hizo que Lucas caminara sobre la arena para crear una impresión de sus pies. Mezclaron yeso en la huella para crear un molde, con el que los diseñadores de Thera-Paw fabricaron el calzado (tipo botita) de caucho y neopreno. 

Desde que le colocaron el calzado, Lucas ha mostrado un modo de andar mucho más normal al caminar y seguramente de aquí en adelante mejorará su calidad de vida.

Los pingüinos africanos, catalogados en peligro de extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, han sufrido a lo largo de los últimos años una disminución masiva de su población.