Millones de personas buscan todo tipo de información en Google. Una de cada 20 cnsultas es sobre salud, pero solo una de cada 10 de una fuente confiable. Sin embargo, ninguna búsqueda reemplaza la consulta personal a un profesional de la salud, médicos veterinarios incluidos.

Algunas personas buscan en Internet antes de ir a la consulta veterinaria, para después ver si corroboran con el profesional. Otras consultan primero al profesional para después corroborar con Google. Otras solo consultan al "Dr. Google".

Lo cierto es que la búsqueda en Internet es una realidad que de una u otra manera afecta en la consulta veterinaria.

Investigadores realizaron un estudio sobre las actitudes de los veterinarios de pequeños animales hacia el uso de los recursos de Internet por parte de los clientes.

Para el estudio, se utilizó un cuestionario en línea que incluyó una sección sobre el uso de los recursos de Internet por parte de los clientes para obtener información médica.

Los autores se propusieron conocer las estimaciones de los veterinarios sobre el porcentaje de clientes que utilizan los recursos de Internet, con qué frecuencia los clientes cuestionan el consejo médico profesional de los veterinarios en función de la información en línea, y las actitudes de los veterinarios hacia el uso de los recursos de Internet por parte de los clientes, entre veterinarios austriacos, daneses y del Reino Unido. 

Los resultados mostraron que el 48,8 % de los encuestados estimó que entre el 40 y el 79 % de sus clientes utilizan recursos de Internet para encontrar información médica. Además, entre el 70% y el 80% de los encuestados afirmaron que, en ocasiones, los clientes les cuestionan sus consejos basándose en la información en línea. 

"Aunque los veterinarios reconocieron las posibles ventajas relacionadas con el uso de los recursos de Internet por parte de los clientes, como una mayor aceptación de diagnósticos y tratamientos avanzados, también destacaron las mayores expectativas de los clientes o las falsas impresiones de las prácticas con animales pequeños como aspectos potencialmente negativos en este contexto", señalan los investigadores y concluyen indicando que "A medida que aumenta el uso de Internet, parece probable que estos temas se vuelvan cada vez más importantes en el futuro".

Dado que la tendencia de buscar información en Google muy probablemente se incrementará en el futuro, será estratégico que los profesionales veterinarios tengan una presencia funcional en Internet y que la consulta presencial esté en línea con el concepto de prácticas clínicas más respetuosas no solo con los animales de compañía, sino con los responsables de los mismos, y con el medioambiente, siguiendo el enfoque de "Una Salud".