Estudio
Efectos secundarios de la terapia sistémica con glucocorticoides en perros
El estudio tuvo como objetivo estimar la frecuencia, describir las características y evaluar los factores de riesgo de efectos secundarios comunes a la terapia sistémica con glucocorticoides en perros bajo atención veterinaria primaria en el Reino Unido.
Los glucocorticoides se utilizan comúnmente en la práctica veterinaria de animales de compañía como agentes antiinflamatorios e inmunosupresores. Sin embargo, los glucocorticoides se han asociado con varios efectos secundarios, que incluyen vómitos, diarrea, aumento o pérdida de peso corporal, poliuria, polidipsia, retraso en la cicatrización de heridas, problemas de comportamiento, inmunosupresión y predisposición a infecciones.
Un nuevo estudio publicado en Fronteras en la Ciencia Veterinaria analizó los efectos secundarios de la terapia sistémica con glucocorticoides en perros utilizando datos de clínicas veterinarias del Reino Unido.
La revisión de los registros de 3.000 perros seleccionados al azar tratados con glucocorticoides sistémicos identificó que el 4,9% de estos perros tenían al menos un efecto secundario registrado dentro de los 31 días de la terapia.
La polidipsia (39% del total de los signos de presentación) y la poliuria (28%) fueron los efectos secundarios más frecuentes, seguidos de vómitos (16%) y diarrea (15%).
Por otra parte, los perros que recibieron solo glucocorticoides sistémicos orales tuvieron un riesgo cuatro veces mayor de polidipsia y poliuria (PUPD) y los perros que recibieron glucocorticoides sistémicos tanto orales como inyectables tuvieron un riesgo diez veces mayor de PUPD en comparación con los perros que recibieron solo glucocorticoides sistémicos inyectables.
El tratamiento con comprimidos de prednisolona solo aumentó tres veces el riesgo de PUPD y el tratamiento con comprimidos de prednisolona y fosfato sódico de dexametasona inyectable aumentó siete veces el riesgo de PUPD en comparación con el tratamiento con fosfato sódico de dexametasona inyectable solo.
Los investigadores del estudio consideran que estos resultados pueden ayudar a los veterinarios a optimizar la selección terapéutica para reducir los efectos secundarios, informar a los propietarios sobre los efectos secundarios comunes y ayudar a proteger el bienestar de las mascotas y sus dueños.